EL CONOCIMIENTO HISTÓRICO. TIEMPO HISTÓRICO Y
CATEGORÍAS TEMPORALES. EL HISTORIADOR Y LAS FUENTES. EXPLICACIÓN Y COMPRENSIÓN
EN LA HISTORIA
INTRODUCCIÓN
Etimológicamente
"Historia" procede del término griego historien, que significa
curiosear, investigar, inquirir. De forma concisa se podría definir el objeto
de la historia como la narración de los hechos del pasado y que en
sentido estricto abarca los hechos realizadmpos por la Humanidad en el
transcurso de los siglos. Lucien Febvre, Carr, Huizinga, y muchos otros han
tratado de definir la historia.
Se plantea la pregunta sobre si
la historia es una ciencia. Se puede decir que es una ciencia cuyo campo de
estudio es el pasado humano y su metodología es la investigación de los hechos,
la reconstrucción del pasado y, la exposición de estos hechos. En ocasicones se
rebaja el carácter científico de la historia por la ausencia de leyes de
regimiento de los sucesos históricos y el carácter subjetivo de la metodología
histórica.
EL CONOCIMIENTO HISTÓRICO
El conocimiento histórico tradicionalmente se
ha concebido de dos maneras. La Concepción lineal de la historia, según
la cual la historia es un proceso de evolución hacia una meta. De raíz bíblica,
se desarrolla en el providencialismo, marxismo y positivismo. La Concepción
cíclica de la historia, donde la
historia sigue un ciclo de tipo biológico. Lo plantea Polibio con la sucesión
de regímenes políticos y finalmente Spengler realiaza una teoría moderna.
Antigüedad: Grecia y Roma
En un principio el objeto de la
historia son los hechos mismos. Existía antes una historia con un sentido
oficial. Se consideró la historia un arte, con una musa: Clío. Hasta el siglo V
a.C., los griegos consideran la historia como una degeneración a partir de una
edad de oro. El ámbito cronológico es siempre reciente y emplean como sistema
de investigación la entrevista con protagonistas de los sucesos. Los griegos
siempre buscan en todos los acontecimientos una aoposición entre orden y caos. Herodoto
(484-426 a.C.) es considerado como el padre de la historia, él mismo
consideraba a sus antecesores como meros narradores (logógrafos). Escribe Historias,
compuesta de nueve libros, uno para cada musa. Tratan de Persia y las Guerras
Médicas, llega hasta la batalla de Micala (479 a.C.). Expone verdades.
Comprende un ámbito cronológico reciente. Narra en torno a un hecho único, la
oposición entre oriente y occidente. Tucídides (455-395 a.C.), autor de Sobre
la Guerra del Peloponeso busca conocer las causas de los hechos. Su tema es
la oposición entre democracia y oligarquía. Escribe también Singraphe.
Aplica un sistema cíclico a la historia de Grecia, que divide en cuatro edades:
Edad primitiva o de Hierro, Edad de los Héroes, Edad de las migraciones y los
tiranos, Edad de las Guerras Médicas. Jenofonte (435-355 a.C.),
discípulo de Sócrates, sirvió con Ciro "el joven". Escribe Helénicas,
complementando a Tucídides; Ciropedia, de carácter biográfico; Anábasis,
donde narra su expedición militar con los diez mil mercenarios griegos, del Tigris
al Mar Negro, está llena de referencias geográficas y etnográficas.
Roma fue heredera directa de la
civilización griega y su primer gran historiador es el griego Polibio
(210-127 a.C.). Llevado a Roma como rehén entra en el círculo intelectual de los
escipiones. Historias narra la historia de Roma desde la segunda guerra
púnica (218 a.C.) a la derrota de Perseo de Macedonia (168 a.C.). De sus
cuarenta libros se conservan cinco. Basa su cronología en la era olímpica, que
había fijado Eratóstenes. Crea la teoría de la sucesión cíclica y lógica de los
regímenes. El hombre solo es protagonista de un proceso repetitivo. Tito
Livio (59 a.C. - 17 d.C.) Escribe Ab
Urbe Condita tratando la historia de Roma como universal. Se ordenaron sus
142 libros en "décadas", se conservan 35. Es más un literato que
historiador. Tácito (55-117), Historia del Imperio romano, obra
pesimista que augura la decadencia romana.
El conocimiento histórico bíblico y el
cristianismo
La Biblia, además de ser
un libro religioso, es un libro de eminente carácter histórico. Hay en él dos
elementos fundamentales para la comprensión de la historia: la cronología y, un
mito interpretativo del sentido de la existencia humana. La Biblia es la
primera historia universal, ya que toma la Humanidad como única. El esquema
cristiano de la historia se basa en tres premisas: el tiempo es lineal e
irreversible, la historia se ordena en torno a un hecho central, la venida de
Jesucristo y que la historia se forma por un plan preestablecido por Dios.
San Agustín (354-430). En La Ciudad de
Dios, contrapone la "civitas dei", donde habitan los que aman a
Dios, con la "civitas terrena", donde viven los que se aman a si
mismos. Divide la historia en seis etapas: De
Adán al Diluvio, del Diluvio a Abraham, de Abraham a David, de David a la caída
de Jerusalem, del cautiverio en Babilonia a la venida de Cristo, de la venida
de Cristo a la segunda venida del Mesías. Discípulo de San Agustín es Paulo
Orosio quien escribió en el 418, Siete Libros de Historia contra paganos.
El plan divino de la historia se basa en la sucesión de cuatro imperios:
Babilonia, Macedonia, Cartago y Roma. En la misma línea Hidacio escribe una
historia donde considera que la entrada de los pueblos germánicos en el Imperio
Romano es una advertencia de la próxima vuelta del Mesías.
Del siglo V al XII la producción
histórica se basa en historias locales, donde la voluntad de Dios es quien
marca los sucesos. Es en este período de la historia cuando se fija una base
cronológica única, contar los años desde Jesucristo. Joaquín de Fiore
(1131-1202). Elabora la teoría del Evangelio eterno, por el cual no solo hay
dos revelaciones (Antiguo y Nuevo Testamento), sino que Dios da una tercera a
los monjes, a partir de ese momento. Santo Tomás (1225-1274) convierte
la historia en un pensamiento filosófico, en virtud del aristotelismo. El
conocimiento histórico se ejerce sobre el pasado, que es la materia; mediante
un proceso psíquico se organiza estos datos en la forma.
Edad Moderna
Maquiavelo (1469-1527). Durante el
humanismo se resucita el interés por las obras clásicas y por los protagonistas
de la historia, desarrollándose el género biográfico. Maquiavelo busca causas y
leyes del acontecer histórico. En su Historia de Florencia retoma el
esquema cíclico de la historia de Polibio. Es un ciclo que depende de la propia
libertad del hombre. También escribio unos comentarios a las primeras décadas
de Tito Livio.
El pensamiento
histórico-filosófico cambia radicalmente con Descartes, quien niega toda
validez a la historia, diciendo que los acontecimientos nunca han sucedido como
se nos relatan. Contra esto reaccionan los cristiano-providencialistas, y la
escuela de Locke. Esta disputa sienta las bases de la crítica histórica, y
establece las premisas para la investigación histórica: la información para ser
tomada por cierta ha de ser contrastada y que los testimonios documentales
deben contar con el apoyo de medios no documentales.
Montesquieu, Voltaire y Rousseau, son los tres más destacados
ilustrados franceses, para los cuales la historia del hombre es la del progreso
ininterrumpido de la razón humana. El hombre así se libera de las tinieblas y
va hacia la verdad. Montesquieu escribe Cartas persas e, Ideas
acerca de las causas de la grandeza y decadencia de los romanos. Los
estados como los hombres son todos iguales, basta con estudiar uno para conocer
a todos los demás. El estado se origina en la psicología del hombre, influyendo
en esta psicología pueden modificarse las instituciones. Voltaire, exige
la secularización total del pensamiento. El siglo de Luis XIV,
representa un momento cultural, no un personaje. Se plantea la filosofía de la
historia en Ensayo sobre las costumbres y el espíritu de los pueblos. Turgot
defiende que el cristinanismo y la filosofía son factores fundamentales de la
evolución de la humanidad a través de la historia. Condorcet, al
contrario, explica como la religión y el exceso demográfico obstaculizan el
progreso humano. Tres son las aportaciones de la Ilustración a la historia:
sienta las bases de historia universal, la humanidad progresa por el esfuerzo
continuado de las sucesivas generaciones. En los primeros años del siglo XVIII
hay una historia ajena a la ilustrada, representada por Juan Bautista Vico,
basada en los "corsi-ricorsi", un planteamiento de la historia
cíclico según el cual el progreso se realiza en espiral.
Edad contemporánea
El inicio de la época es la
convulsión debida a la Revolución Francesa y su contagio al resto de Europa por
la acción de Napoleón. Pronto surge una serie de historiadores que consideran a
la burguesía como protagonista de la historia, es la historiografía liberal.
Simultáneamente el romanticismo, corrientede origen alemán, considera
que el protagonista de la historia son los pueblos. La tercera corriente del
siglo XIX es el positivismo, que pretende aplicar métodos de las
ciencias naturales y depurar lo subjetivo y dejar solo el estudio de los
documentos históricos. La cuarta y más importante aprotación al conocimiento
histórico es el marxismo y el materialismo histórico. Elabora una teoría
de la evolución social basada en los modos de producción. El materialismo
histórico explica la evolución humana a través de unas etapas de progreso
que vienen marcadas por las relaciones de producción.
En el siglo XX se renuevan las
teorías cíclicas de la historia, con Spengler y Toynbee, este último planteando
la historia como una sucesión de civilizaciones que todas pasan por las mismas
fases de desarrollo. La mayor renovación llegará con la Escuela de Annales,
que se agrupa en torno a la revista Annales, siendo Bloch y Febvre sus primeros
directores, sucedidos después por Braudel. Realizan una historia integral,
uniendo los acontecimientos sociales, económicos. Rompen con los esquemas
temporales tradicionales y plantean una periodización en función del tiempo,
largo, medio y corto. Hay, por otra parte, una renovación del marxismo,
sobre todo desde la Revolución Rusa. Prestan mucha atención a lo económico pero
acaban supeditándolo a los social. Por último, la Nueva Historia Económica,
también llamada historia cuantitativa, analiza un gran volumen de datos
estadísticos para elaborar la historia.
TIEMPO HISTÓRICO Y CATEGORÍAS TEMPORALES
Las categorías temporales para
unos tienen un valor meramente instrumental, mientras otros consideran que la
periodización presupone un juicio de valor.
La cronología histórica
El hombre para fijar los
acontecimientos históricos en el tiempo necesitó crear un sistema de datación.
La más básica es la sucesión de los años que se basan en la alternancia de las
estaciones. En las sociedades hidraulicas de Mesopotamia y Egipto era
fundamental el conocimiento de la sucesión del tiempo para poder organizar la
agricultura. La elaboración de los calendarios estuvo en manos de los sacerdotes.
Después los años hay que distinguirlos unos de otros, para lo cual se numeran
desde un origen Los griegos usaron la Era olímpica, cuyo inicio está 23
años antes de la fundación de Roma. La Era de la Fundación de Roma, se
usó en la Antigüedad, fijada entre 751 y 754 a.C, aunque los romanos llamaban a
los años con el nombre del consul senior de ese año. La Era Cristiana,
se basa en la fecha del nacimiento de Cristo, fijada según Dionisio el
exiguo en el 750 de la fundación de Roma, si bien hoy se sabe que se
equivocó en cuatro años.
Durante la Edad Media, en los
distintos reinos europeos, el año se iniciaba el 25 de Marzo, 1 de Marzo, o 25
de Diciembre. No es hasta el XVI que se empieza a generalizar el 1 de Enero. El
calendario que actualmente empleamos los occidentales y que se ha generalizado
a todo el mundo, tiene su origen en el romano que transformó Julio Cesar, y que
luego fue enmendado en el siglo XVI por Gregorio VII. De aquí que se le llame
calendario juliano o gregoriano.
La periodización de la historia
Desde los griegos, los
historiadores han tratado de agrupar periodos más o menos largos de tiempo, que
sean de alguna forma homogeneos. Tucidides ya divide la historia de Grecia en
cuatro edades. El sistema de las eras que se emplea en la actualidad data del
XVII, cuando Voetius divide la historia de la Iglesia en tres edades:
A Antiquitas ecclesiae. Del
origen al siglo VI.
A Intermedia aetas. Hasta Lutero
(1517).
A Nova o recens aetas. El momento
del autor.
A fines del XVII esta división
tripartita la asume para la historia europea Cristóbal Keller: Historia
Antiqua, Historia medii aevi, Historia nova. Según avance el tiempo, se van a
añadir dos periodos nuevos, la Prehistoria y la Edad Contemporánea. De esta
forma la Prehistoria agrupa los hechos de la humanidad hasta la aparición de la
escritura, la Antigua llega hasta la caída del Imperio Romano (en Hispania el
año 410, en general el 476), la medieval llega hasta el siglo XVI (caída de
Constantinopla en 1453 y en España 1492 por el fín de la Reconquista y el
descubrimiento de América), la moderna llega hasta la Revolución Francesa (en
España hasta 1808), la Contemporánea llega hasta nuestros días. Esta es una
visión eurocéntrica, ya que fuera de nuestro ámbito los límites cronológicos y
el número de edades carece de sentido. Incluso dentro de Europa, los ingleses
no contemplan la contemporánea y siguen en la edad moderna.
Esta división cronológica ha
sido puesta en cuestión, en especial por la Escuela de Annales y el
materialismo histórico. Braudel propone una periodización en la que
desaparecería Edad Moderna, para englobarse en la Media. El materialismo
histórico por su parte periodizan la historia según modos de producción De
esta forma hay una primera etapa en la que el hombre vive depredando sobre el
medio, de tal forma que no hay propietario del medio de producción, es el
salvajismo. Después vienen el esclavismo donde la propiedad del medio de
producción incuye la de la fuerza de trabajo. En el feudalismo hay una relación
entre siervo y señor de explotación extraeconómica. En el capitalismo la fuerza
de trabajo es libre pero carece de acceso a la propiedad de los medios de
producción. La historia acaba en la última etapa, el socialismo, donde la
fuerza de trabajo se convierte en propietaria del medio de producción.
EL HISTORIADOR Y LAS FUENTES
Fuente histórica es todo aquello
que nos pueda transmitir un conocimiento total o parcial del pasado. Se han
tratado de clasificar las fuentes. Mabillon, padre de la Paleografía,
separó primero las fuentes veraces de las falsas. El estudio filológico que
realiza en el siglo XV Lorenzo Valla de la Donación de Constantino demuestra la
importancia que tiene saber valorar como auténtico o falso un documento. Topolsky
distingue entre fuentes directas e indirectas. Cuando el historiador ha
recogido las fuentes, su siguiente paso es la sistematización de los datos
obtenidos. El último paso será la síntesis interpretativa, que desarrollará una
hipótesis fundamentada en los datos recogidos. El historiador debe seleccionar
entre las fuentes, empezando aquí el primer subjetivismo.
Hasta la renovación de Annales
la única fuente histórica era el documento escrito. Ahora van a considerar que
todo objeto hecho por el hombre es susceptible de convertirse en una fuente histórica.
Historia y ciencias auxiliares. Hoy las llamadas ciencias
auxiliares de la historia, han adquirido una metodología científica propia, que
las hace dejar de estar supeditadas a otras ciencias, para tomar carácter
propio. Se distingue entre ciencias auxiliares que colaboran en la fase inicial
del trabajo histórico, y ciencias colaboradoras que muestran nuevas
posibilidades de métodos de investigación.
EXPLICACIÓN Y COMPRENSIÓN EN LA HISTORIA
El objetivo del historiador es
la comprensión del pasado. Para ello debe tratar de siturase en la época de
estudio y tratar de entender desde los parámetros de la época. Lo contrario es
el llamdo actulismo, interpretar con los parámetros de hoy los acontecimientos
del pasado.
Causalidad frente a multicausalidad. Bloch rechaza el automatismo
de la causa única, construyendo haces de hondas causales. Para cada suceso
existen innumerables causas. Duby cuestiona el principio de causalidad y dice
que es preferible hablar de correlaciones e influencias de unos sucesos sobre
otros.
Individuo frente a sociedad. Durante el siglo XIX se hace
la historia de los héroes, donde un solo hombre puede cambiar la historia.
Serán los historiadores marxistas los que resten importancia al individuo,
quien no puede variar la tendencia general de los acontecimientos. Para Pierre
Vilar la iniciativa histórica parte del individuo socializado.
Historia como relato y como
problema. Desde
que funciona la Escuela de Annales, sobre todo con Lucien Febvre, ya no hay que
preguntar quién y cuándo, sino por qué. Se rechaza en el relato lo anecdótico,
pero subrrayando la importancia del proceso narrativo para la comprensión del
hecho histórico.
BIBLIOGRAFIA
BERMEJO Y BARRERA,J.C.: Fundamentación
lógica de la Historia. Madrid, 1991.
FEBVRE, L.: Combates por la historia.
Barcelona, 1975.
FONTANA, J.: Historia: análisis del pasado
y proyecto social. Barcelona, Crítica, 1982.
SÁNCHEZ PRIETO: )Qué es la historia?. Madrid, Siglo XXI, 1995.
TOPOLSKY, J.: Metodología de la Historia.
Madrid, 1982.
VILAR, P.: Iniciación al vocabulario del
análisis histórico. Barcelona, 1980.
fuente: http://www.auladehistoria.org
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